Reseña: The xx – I See You (2017)


La banda ha creado una dimensión más profunda en su sonido con las aportaciones que hace Jamie y los diferentes músicos orquestales que colaboran. Han sabido reinventarse, creando un sonido más vibrante sin perder su esencia.
Estética del Sonido
9.4
Narración y Discurso
8.6
Técnica de Producción y Mastering
8.4
Creatividad
10
Nota de lectores2 Votos
5.2
9.1
The xx - I See You
Young Turks /// Producción: Jamie xx y Rodaidh McDonald

5 años han pasado desde que escuchamos por primera vez el muy esperado segundo disco de The xx. Aunque el resultado no fue malo, tanto la prensa especializada como los fans quedaron insatisfechos ante un trabajo experimental que carecía de cuerpo y dinamismo. Probablemente todo se debió al extraño y aislado proceso de composición y grabación del álbum, un problema que algunas bandas enfrentan al grabar su segundo disco de estudio. Ahora, los londinenses se enfrentan al reto definitivo: mostrar con su tercer disco de larga duración que su majestuoso debut del 2009 no fue casualidad, sino producto de la genialidad de sus integrantes. Para sorpresa de todos, I See You supera las expectativas que vertimos en él.

La leyenda dice que el tercer disco es el más difícil. En el primero, las bandas gozan de cierta confianza, ingenuidad, y muchas veces, de un gran catálogo de canciones que han compuesto a lo largo de varios años. Si tienen éxito, normalmente se embarcan en alguna gira que les impide dedicarse de lleno a seguir componiendo, por lo que cuando llega el momento de volver a grabar para el segundo disco, escogen algunas canciones que no lograron entrar en el primero pero que mantienen un buen nivel, o se limitan a repetir la fórmula que les funcionó. Pero cuando llega el tercero, es cuando normalmente las bandas, o logran reinventarse y consolidar su sonido, o ya no pueden construir nuevamente algo interesante y la gente pierde el interés en ellas. Los ejemplos son muchos a lo largo de la historia del rock. Afortunadamente para The xx, en su tercer disco han sabido superar todos los obstáculos y regalarnos un sonido cautivante y catalizador, que los revitaliza y probablemente los lleve nuevamente a un estatus de culto mundial.




De forma general, I See You es un álbum muy emocional que retrata diferentes características de la condición humana: miedo, amor, olvido, error; todo con la acostumbrada forma de escribir en primera persona de Oliver Sim y Romy Croft, contándonos historias personales que se sienten íntimas y reales. No es un álbum estilísticamente profundo, pero nos identificamos profundamente con las situaciones planteadas, contadas de forma muy humana, algo que probablemente hará que sea un disco escuchado y apropiado durante muchas generaciones.

«Dangerous» abre el álbum de una forma fenomenal, revelando la genialidad y maestría que Jamie xx tiene con el garage UK y el drum and bass. Mientras el track se va desarrollando, las aletargadas pero entrañables ambientaciones de su debut son transformadas en sensuales construcciones que ahora juegan con samples mucho más complejos y ricos en texturas y sonidos. Esto, afortunadamente se repite durante todo el disco, sin que deje de haber sorpresas en otros tracks. De esta forma, The xx ahora ha entrado en una etapa mucho más rítmica y viva en su sonido, sin traicionar ni a su esencia ni a sus fans.

En «Lips», la banda muestra su poderío para hacer piezas espirituales en un intento de purificar sus experiencias en el amor. Los coros cuasi evangélicos de este track y los aplausos tipo gospel, que se repiten sistemáticamente, son un gran ejemplo del gran esfuerzo por componer piezas más ambiciosas que guían al escucha hacia una experiencia aún más emocional, introspectiva, vulnerable y personal. Una renovación perfecta para la banda.

Pocas bandas alcanzan un equilibrio tan perfecto entre sus integrantes como esta vez lo ha conseguido la banda. El álbum está pensado para que los tres integrantes sobresalgan, cada uno en momentos específicos. Por primera vez en la música de The xx, escuchamos samples prominentes, los cuales Jamie Smith considera que son su verdadera «voz», algo que termina por cuajar todo lo que eran en un nuevo estilo muy vibrante y muy rítmico; pero Smith no se limita a la electrónica, sino que también colabora en ciertos momentos con violin (track 5), vocales (track 10), y la dirección de los arreglos de cuerdas que ejecutan un aproximado de 10 músicos. Estas aportaciones de Jamie son ahora la pieza clave que funcionan como eje central para dirigir la experiencia hacia horizontes más completos.

Las puntiagudas líneas de bajo de Oliver encajan perfectamente cada vez que se les oyen en el vibrante nuevo estilo, aunque han dejado de ser protagonistas desde su segundo álbum. La guitarra de Romy, cada vez más minimalista, sutilmente rellena espacios para solidificar la experiencia. Las voces están mejor logradas que nunca, pero su intención también ha cambiado: aunque se conserva el dramatismo en tracks como «Performance» y «Brave for You», donde se visten nuevamente con lamentaciones que nos transmiten sufrimiento y desconsolación, existen otros momentos como «On Hold», donde el ambiente se tropicaliza y relaja, influenciándose severamente del In Colour (2015) de Jamie xx para llevarnos hacia tonos más sosegados y felices.

Justamente el track más sorpresivo y mejor logrado es, sin duda, el primer single, «On Hold», donde Jamie deja de manifiesto el genio que es para componer los ambientes adecuados sobre los cuales se erigen discursos perfectos en tonos armónicamente magistrales. «On Hold» es una joya que le canta a la juventud y nos proporciona un efecto tan poderoso como «1979» de Smashing Pumpkins, «Teen Age Riot» de Sonic Youth, o «Everlong» de Foo Fighters, cada una en su propio estilo. Sin exagerar, este es uno de los mejores tracks en toda la carrera de la banda y una de las mejores canciones de toda la década. Sin embargo, a muchos fans no les ha gustado mucho el cambio de sonido específicamente de este track… ¿Qué no tienen sensibilidad o simplemente sus expectativas ridículas los ciegan?

Parece claro que I See You resuelve perfectamente los errores (si es que se les puede llamar así) de Coexist (2012). Resuelven la falta de instrumentación. Resuelven la monotonía. Superan el tortuoso camino que atravesaron durante la grabación de su segundo álbum por problemas de comunicación, intimidad y vínculos. Pero lo importante es que este disco no es una continuación de xx (2009), no, por primera vez se siente un acercamiento a un nuevo nivel por parte de la banda sin ser un cambio radical. Este es un disco que tiene su propia esencia, algo imprescindible para lograr su trascendencia. La banda no ha dejado de ser minimal, pero ahora se han arriesgado a presentar una propuesta que esperamos, siga evolucionando en el futuro.

¿Cuáles son los puntos negativos del disco? Definitivamente hay pocas flaquezas del álbum. La más notoria, es «Test Me», track que concluye el álbum, y aunque definitivamente se siente como una conclusión, no se siente como el final correcto de la experiencia que nos acaban de ofrecer los ingleses. Afortunadamente, los bonus tracks incluidos en el vinyl boxset hacen que se diluya esta última mala experiencia con 2 canciones extra y un demo que valen mucho la pena.

En conclusión, I See You ha logrado superar todas las expectativas que estaban vertidas en él. Y eso es ya decir mucho del discazo que es. Sin embargo, tal vez su único error es haber salido después de un disco decepcionante y uno perfecto, algo que hace difícil determinar exactamente cuál es el valor que tiene. Pero bueno, de eso ya se encargará la historia, mientras, nosotros no lo dejaremos de reproducir en un buen rato.

The xx es una banda de indie pop del suroeste de Londres, Inglaterra, formada en 2005. La componen tres veintiochoañeros que se conocieron en el Elliott School, conocido por haber dado grupos como Hot Chip, Burial y Four Tet. En The Future 50 list de New Musical Express (NME) ocuparon el puesto 6 en 2009. Su álbum debut xx fue editado el 17 de agosto de 2009 en el sello Young Turks Records, disco con el cual ganaron el Mercury Prize y la aclamación mundial.